Las faldas funcionan muy bien como parte de un uniforme ejecutivo. La clave para que una falda se vea bien es encontrar la falda correcta para tu tipo de cuerpo. Al seleccionar una falda para el trabajo, escoge una falda que sea vea apropiada y cómoda, en la que puede llevar a cabo diferentes tareas como sentarse, agacharse, recoger cosas o alcanzar cosas altas.

Los colores neutrales como el negro, café, crema o gris son apropiados para todas las temporadas y se ven bien en entrevistas, juntas, ocasiones semi-formales y la mayoría de los eventos corporativos.

Los cinco mejores tipos de faldas para el trabajo son:

Falda Lápiz

Las faldas de lápiz son la moda más contemporánea para el trabajo. Se ven bien combinadas con blusas o como parte de un traje. Es fácil agregarles accesorios y se ven bien con la mayoría de los tipos de cuerpos.

Falda en A

Con una forma holgada de la parte de abajo que se ajusta más hacia la cintura, este tipo de falda toma la forma de la letra A. Se usa comúnmente a lo largo de la rodilla o un poco más abajo, lo que lo hace perfecto para una falda de trabajo.

Falda Acampanada

Cómoda y casual, la falda acampanada es menos común que los otros estilos que hemos descrito, pero funciona en un lugar de trabajo menos formal. La falda acampanada es muy similar a una falda recta, con una sección en la parte de abajo que sale en forma de campana.

Falda Recta

Como el nombre sugiere, las faldas rectas son faldas que mantienen el mismo ancho desde la cintura hasta la parte inferior. Las faldas rectas son el modelo ideal para mujeres trabajadoras de todos tipos de cuerpos. Las faldas rectas vienen en longitudes diferentes: al tobillo, a la mitad del muslo o a la rodilla; lo que las hace muy practicas para la oficina. Adicionalmente las faldas rectas cuentan con una apertura, en alguno de los lados o el frente para facilitar el movimiento de quien las usa.

Faldas de Plecas

Las faldas de plecas son una prenda perfecta para la oficina, ya que se puede combinar con un sin-fin de posibilidades como blusas de botones, suéteres, camisas o chalecos. Las faldas de plecas largas son tan elegantes y a la moda como otros modelos. Versiones modernas de las faldas con plecas son universalmente apropiadas para la oficina y combinan muy bien con o sin medias para todo tipo de cuerpos.

Los uniformes policíacos han tenido una historia única y colorida desde su comienzo en los primeros años del sigo XIX, y aun que los estilos específicos del uniforme pueden variar de lugar a lugar, comparten ciertos elementos y un propósito común.

Los agentes policíacos utilizan el uniforme para ayudarlos a establecer una presencia visual, permitiéndolos ser fácilmente identificados por los ciudadanos que puedan requerir su asistencia. En muchas ocasiones un oficial uniformado es suficiente para detener un crimen y los uniformes ayudan a que los agentes se identifiquen entre ellos rápidamente en la escena de un crimen.

Primeros uniformes policíacos de los principios de los años 1800’s

La estandarización de los uniformes de policías se implemento en el Reino Unido en el año 1828. Los oficiales portaban un traje de cola azul con cuello alto, pantalones blancos durante el verano o pantalones oscuros durante los meses más fríos y un sombrero reesforzado con varillas que cumplía con dos propósitos: una prenda que los distinguía fácilmente y un escalón para que pudieran ver encima de bardas o cercas. Se diferenciaban de las patrullas militares ya que no portaban armas.

Evolución del uniforme moderno

En 1854 empezaron a surgir los primeros uniformes estandarizados en Estado Unidos en las ciudades de Boston, Nueva York y Chicago. Los uniformes consistían principalmente de uniformes que sobraban del Ejercito de la Unión – un traje azul y un sombrero alto o un casco. Al mismo tiempo en zonas más rurales se acostumbraba usarse ropa de civil y solo una placa oficial que identificaba a los policías y los distinguía del resto de la población.

Para el principio del siglo XX, se formalizo el uniforme que ahora icluye una camisa de botones con una corbata, pantalones oscuros y una chamarra estilo militar. En esta época fue cuando los policías también empezaron a usar las gorras de pico duro para distinguirlos como servidores públicos. Las armas se volvieron un estándar oficial y la chamarra se usaba para cubrirlas.

En los años 1960’s los uniformes cambiaron drásticamente, utilizando más prendas de un estilo de negocios formales y menos militarizado. Esto permitía a los ciudadanos ver al cuerpo policiaco de una manera más humana.

En la actualidad los uniformes tomaron una forma mas militar al incluir elementos tácticos para proteger a los policías mientras hacen sus labores.

Los uniformes de los policías varían en color de país en país, pero generalmente son de tonalidades oscuras. Existen razones tanto practicas como psicologicas para esto. Los colores oscuros esconden bien la suciedad y manchas de mejor forma que los colores claros. También los colores oscuros son más difíciles de ver de noche, lo que los hace perfectos para operaciones clandestinas. De acuerdo a varios estudios, los colores también influyen en la percepción de las comunidades hacia las fuerzas policíacas; mientras que el azul muchas veces se asocia con sentimientos de seguridad, el negro normalmente es un color más agresivo.

No es ninguna sorpresa que los uniformes de policías juegan un papel importante en crear un lazo entre las comunidades y los departamentos policíacos en los que confían en protegerlos. Es y siempre será una herramienta sumamente importante para todas las fuerzas policíacas.

Los colores juegan un papel muy importante en nuestras vidas. El mundo seria un lugar muy monótono y aburrido sin todas las diferentes tonalidades.

Es el mismo caso cuando hablamos del uniforme de nuestra empresa, por lo que es muy importante seleccionar prendas para el uniforme que se vean profesionales, estéticas y visualmente atractivas, sin dejar de ser congruente con los objetivos de la empresa.

Los colores más comunes en los uniformes son: blanco, negro, azul y gris.

Blanco

El blanco es el color más tranquilizante y fresco. Cuando se usa en la combinación correcta, contrasta los otros colores. El blanco es un color apropiado para el uso en oficinas corporativas al agregar sofisticación a la imagen general, al combinarse con azul oscuro o negro. También es comúnmente utilizado en las industrias de hospitalidad como restaurantes, clubes y bares. De igual manera, las batas blancas en los hospitales ayudan a identificar a los doctores entre el resto del equipo.

Negro

Los trajes ejecutivos se ven especialmente bien en negro. Una de las principales ventajas es que se pueden combinar con muchas camisas en diferentes colores claros.

El color negro refleja elegancia y autoridad, lo que lo hace un buen color para las personas en altas posiciones de la jerarquía de una empresa.

Azul Marino

El azul oscuro es un tono muy efectivo para todos los empleados de piso. Los colores oscuros se ven limpios durante más tiempo, lo que permite que se puedan usar más veces sin verse sucios; esto lo hace un excelente color para todo tipo de empleados, desde trabajadores de fábricas hasta empleados de oficinas.

Azul Claro

Los tonos de azul claro generalmente son asociados con los uniformes de empleados de instituciones medicas. Alrededor del mundo se pueden ver a los equipos paramédicos de los hospitales portar diferentes prendas en tonalidades claras de azul, esto ayuda a los pacientes a identificarlos gracias a su universalidad.

Gris

Diferentes tonos de gris se utilizan en varias industrias a nivel mundial ya que casi todas las variedades de gamas del color se ven bien en todo tipo de prendas de uniformes. No solo es un color que refleja profesionalismo, también es fácil de combinar con otros colores del logotipo de tu empresa.

El uniforme de su empresa es un elemento fundamental de la identidad visual de su marca. Tanto los colores como el logo de su organización ayudan a identificar a las personas que ahí trabajan, ayudan a que los clientes puedan identificar a sus empleados y sirven como publicidad para su empresa. Por eso, es muy importante que el logo de su empresa sea del tamaño correcto, se ubique en una parte del uniforme donde se maximice su visibilidad y atraiga la atención de los clientes.

A continuación describimos algunas de las mejores posiciones para colocar su logo en el uniforme de su organización:

Espalda:

La parte de la espalda de una playera, camisa o chamarra que forman parte de su uniforme, es el área con más espacio disponible. Esta posición es especialmente favorable si su logo es muy detallado y su aplicación pueda dificultarse en espacios más pequeños. Un logo grande resaltara y será más fácil de identificar y leer a distancia.

Pecho:

El pecho desde luego es uno de los espacios preferidos donde colocar un logo en su uniforme, ya que es el lugar más visible cuando se esta hablando con un cliente cara a cara.

Sirve como un recordatorio constante de la marca cuando se esta atendiendo a un cliente y así será más fácilmente recordado.

Pin:

Poner el logo de su empresa en un pin mantiene los mismos beneficios que un logo impreso o bordado en el pecho, pero nos da la posibilidad de agregar más información como puede ser el nombre de un empleado o alguna promoción temporal, se pueden cambiar sin tener que cambiar el uniforme y le proporciona a los empleados la posibilidad de lavar prendas de su uniforme y solo colocar el pin en lo que viste ese día.

Gafete:

Un gafete le proporciona a los empleados la habilidad de cambiar su uniforme día a día, al mismo tiempo que proporciona información adicional, como puede ser el puesto del empleado o su foto para poderlo identificar como tal.

Cuando diseñes el uniforme de tu empresa considera cual de estas opciones son la mejor para tu organización.

Escoger el uniforme correcto para el uso de los empleados de tu empresa, es una gran decisión para su organización. La principal pregunta que se hacen muchos de los dueños de las empresas es: “¿Son necesarios los uniformes?”

Aun que nadie conoce a tu empresa mejor que tu, existen múltiples beneficios de tener un uniforme empresarial.

Uno de los mayores beneficios es dejar que la imagen de tus empleados hablen por su empresa. A continuación describimos algunas de las cosas que proyecta el uniforme de su empresa:

Tienes confianza:

Los uniformes promueven un sentido de unión entre los miembros de su equipo. Cuando un empleado se siente parte de un equipo, se siente cómodo mientras trabaja y se ve bien y limpio, se siente más confiado de poder realizar sus labores.

Eres un profesional:

Las primeras impresiones siempre son muy importantes. Al seleccionar el uniforme apropiado para ti y tus empleados, logras establecer una imagen profesional que logra atraer y retener a sus clientes.

Eres confiable:

Los uniformes dan una imagen seria y profesional, que ayuda a los clientes a identificar a los empleados de cierta empresa u organización. Esto ayuda a que el cliente se sienta cómodo de estar hablando con la persona correcta y que le puede ayudar.

Eres organizado:

Cuando tu y tus compañeros de trabajo muestran el logotipo y los colores de su empresa u organización, ayudan a que los clientes puedan diferenciarlos de sus competidores. Una imagen limpia y profesional, le demuestra a todos que tu y tu empresa son organizados, agregando valor a su imagen.

Personalidad:

Un uniforme puede transmitir también la personalidad especifica de una organización. Un uniforme puede transmitir la seriedad de un ejecutivo al ser un traje más formal, o puedes usar colores o patrones diferentes para darle más vida y diversión a la imagen de su empresa.

Cual sea la finalidad de los uniformes, siempre es importante comunicar con congruencia la imagen que deseas transmitir de tu empresa u organización, y que al mismo tiempo cumpla los requerimientos de seguridad de los puestos que lo requieran, se vean limpios y sean cómodos para poderse usar en las labores diarias de los miembros de su equipo.